viernes, 3 de julio de 2009

QUINQUI - STARS



Os pido que leáis con detenimiento la siguiente noticia. Habla sobre la inauguración en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona de una exposición sobre el cine quinqui de los 80. En concreto es presentada como una “mirada sobre el cine quinqui, que vivió su apogeo entre 1978 y 1985, centrándose en su relación de retroalimentación con la prensa de la época. “

El vaquilla, el tetillas, el jaro, el torete, el pepsicola…. Motes que identificaban a auténticas figuras del ampa, líderes prematuros de entre 12 y 17 años que lideraban bandas que despreciaban la vida y se precipitaban en una continua , rápida y anárquica búsqueda de la muerte a toda costa. Formaron parte de un movimiento social que se desarrolló principalmente en el extrarradio de ciudades como Madrid y Barcelona, como respuesta al hecho de formar parte de un estrato de la sociedad absolutamente deprimido y apartado del resto, y que no vislumbraba ni por asomo esperanza alguna de remontar el vuelo... La conmoción general fue de tal magnitud que generó un estilo cinematográfico que mostraba con crudeza la realidad del asunto e invitaba a la reflexión general.

Uno de los filmes más conocidos fue “Perros Callejeros” (1.977) del fallecido Jose Antonio de la Loma. Os dejo un video con la introducción a la misma. Sinceramente me parece uno de los comienzos de película más emocionantes que recuerdo, sobre todo por el mensaje que lanza en los 30 últimos segundos:



Todo este movimiento fue aniquilado. Ya no queda nadie vivo que pueda contarnos algo. Posteriormente, la heroína sirvió para anestesiar esas ganas de romper con todo y remató al que no hubiera muerto en accidente, tiroteo o reyerta.

Ahora , y volviendo a la actualidad; os inserto un video que realmente me dejó perplejo cuando lo vi por primera vez. Pertenece, como no; a “Callejeros”, programa que se ha encargado de poner de moda el entretenimiento (que no la reflexión...) a costa de mostrar el desamparo de unos cuantos. Es realmente escalofriante. Solo os adelantaré lo flipante que es el cambio de opinión de los protagonistas con respecto a los periodistas y el giro de mal rollo que se produce justo al final ...



¿Como os quedais? Despues de verlo os pediré que me expreséis vuestra opinión sobre este nuevo fenómeno social , caracterizado por el exceso y la ausencia total de principios: ¿Hará mella en la cultura y el cine? ¿Lo recordaremos dentro de 30 años con exposiciones como algo mítico?¿Que me decís?

3 comentarios:

M dijo...

no lo se, la verdad es que es una buena pregunta. Con la distancia, a todo se le da una pátina de cultura. Hace unos años flipamos cuando el desaparecido "Tentaciones" del país (biblia del moderneo en su momento) empezó a reivindicar a la ruta del bakalao como movimiento cultural (?) así que no me extraña nada. El mal rollo con los putos bakalas descerebrados y comidos por la droga es algo que más o menos todos hemos vivido. En la Mannix y en La Cama algunas veces he tenido altercados de todo tipo por culpa del estado de paranoia obsesiva que llevan los cabrones contínuamente.

Unknown dijo...

No creo que tenga nada que ver una cosa con otra, me explico, no es que vaya de entendido ni nada por el estilo, pero como tú bien dices Gómez, la historia del Torete y compañia venía dada por la triste situación social en la que estaban metidos y que ni ellos ni nadie hacía nada por cambiarla. En ambio estos "colgaos" están de pasta hasta el cuello, seguro que son traficantes por eso llevan la pipa, esta gente despilfarra la pasta que lo flipas y en su cas no creo que estén en la misma situación que los que estaban en el Campo de la Bota, estos son gente sin principios ni moral que se creen que están por encima del resto de los mortales y por supuesto, de la ley... A cada cerdo le llega su San Martin.

Gomez dijo...

Estoy de acuerdo con los dos, tanto con que el tiempo le da una pátina mítica a las cosas y tb con lo de que no tiene nada que ver una cosa con otra.
No se cual es la razón que ha arrastrado a este tipo de gente a ser tan lamentables, pero lo que está claro es que no se les ve pasar hambre, no...Lo defino como la auténtica falta de principios de todo tipo. Es el colmo del nihilismo... A mi me da más miedo verlos que cualquier película de terror