jueves, 13 de agosto de 2009

ESCRITURA AUTOMÁTICA – 1.989



Siempre he diferenciado dos vertientes básicas en la música popular. Una es la que no exige implicación visceral de ningún tipo y que pasa muy superficialmente con respecto a lo que nos inquieta ; y otra que se basa precisamente en esto último: las cosas que nos dejan huella. Esta es una distinción muy a grosso modo, y dentro de cada una existirán miles de diferenciaciones a gusto del consumidor.

Aunque consumo material de las dos vertientes, la que más se apodera de mi son las propuestas en las que el autor se involucra al 100 % y pone a disposición de quien le interese una conversación consigo mismo. Precisamente esto es lo que ha hecho Mephisto con el disco que voy reseñar. “Escritura Automática – 1.989” podría ser el primer disco en solitario de Mephisto y creo que da nombre a la materialización de ese tipo de conversaciones.

Puedo decir que Mephisto me confió parte de este disco cuando todavía estaba sin mezclar. Me sorprendieron sus dudas al respecto , lo cual me recordó a cuando yo también las tuve al dar el salto para hacer mi propia música. Me ha servido para darme cuenta de que no era el único. Al final el hecho que supone comprender que cualquier obra está inacabada si no la muestras, pudo con todo, lo cual me alegra bastante. Ninguna obra tiene sentido si no existe un espectador , independientemente de cual sea su reacción.

Lo que más sorprende de esta colección de canciones es la valentía por apostar por primera vez en utilizar el castellano. Creo que si quieres mirarte directamente a los ojos y expresar al máximo lo que te inquieta, preocupa o no entiendes, que mejor forma de hacerlo que con el mismo idioma que utilizas para hablar con tu gente más cercana. Esto me parece un paso de gigante. Esta apuesta no ha caído en saco roto y creo que ha supuesto una clara victoria artística. En concreto, conmigo ha conseguido que me meta en la interpretación de sus historias, repletas de poesía y metáfora; de forma que no he necesitado ningún esfuerzo extra. Cuando necesitas el esfuerzo de la traducción el mensaje nunca va a buscarte, si no todo lo contrario. Y la cosa no fluye de la misma forma.

Son 10 temas perfectamente ubicados y que se complementan con un cuidadísimo art-work , donde quizás vea la mayor diferencia con respecto a todo lo que M ha hecho con MMT. No hace falta saturar y ennegrecer obligatoriamente el art work de un disco para conseguir el efecto que ha conseguido en “1.989”. Esos tonos verdes son realmente sugerentes y a un servidor le gustaría poder materializar este disco alguna vez en formato físico.

Musicalmente hablando , pues tenemos un poco de todo; tamizado obviamente por música electrónica. Hay oscuros momentos instrumentales como en 3:45, Hypnos o Diluido, un pasaje pseudo-cañi-siniestro llamado “Nada de esto sucedió” (donde samplea los coros y las trompetas más apocalípticas de la historia de nuestra música) , canciones que perfectamente podrían haber sido desarrolladas en MMT , como la agresiva “Lista de tareas” o “La Casa Muerta” y por último 4 temas que para mi constituyen lo mejor del disco: “El largo camino a casa”, “El rey de los insectos”, “Húndete ya de una vez” y “Domingo por la mañana”. Aquí es donde M muestra su forma de componer más personal , sonando única y exclusivamente a él mismo. Me gusta especialmente “El rey de los insectos”. Creo que es un tema realmente bueno , la letra y la melodía me encantan, la instrumentación es minimalista y efectiva a más no poder. Menos es más. Siempre. Pero claro, también tienes que dar con lo que tienes que dar. Y aquí M se lo encuentra de cara.

En definitiva, solo me queda dar la enhorabuena a M por su valentía y sinceridad. Me enorgullece que alguien con tanto talento haya accedido a formar parte de mi proyecto (recordad, M es el batera del SuperSonido) Y nada más, después de esta parrafada; descargad el disco, merece mucho la pena.


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1 comentario:

M dijo...

Solo por estas cosas... merece la pena publicar la obra de uno.

Gracias por el texto!